Una vida dedicada a la cría ética y familiar

Desde 1988, en Del Capricho trabajamos con pasión en la cría selectiva y familiar de perros, priorizando siempre la salud, el equilibrio y el bienestar de cada ejemplar. Lo que comenzó como una afición compartida en familia, hoy se ha convertido en un proyecto consolidado.

Del capricho

Criamos desde el respeto y el cariño

Nuestra filosofía se basa en ofrecer cachorros únicos, criados con respeto, en un entorno limpio, seguro y lleno de atención. Cada uno de nuestros perros es parte de nuestra vida diaria, crece rodeado de cariño y es supervisado desde su nacimiento con un riguroso control físico y emocional. No trabajamos con macrocriaderos ni importamos animales; defendemos la cría responsable, sin prisas ni sobreexplotación.

Instalaciones adaptadas al bienestar animal

Contamos con instalaciones adaptadas y revisadas por profesionales, donde el confort, la higiene y la calidad de vida de nuestros ejemplares es una prioridad. Casas de madera, suelos antibacterianos, bebederos automáticos, zonas verdes y vigilancia 24h garantizan un entorno óptimo.

Incluso cuidamos detalles como la música ambiental o las rutinas al aire libre para reducir el estrés y fomentar el equilibrio emocional de los cachorros.

Elegimos familias con el mismo compromiso

Nuestro objetivo no es solo entregar un perro, sino formar parte de una historia compartida con su nueva familia.

Elegimos cuidadosamente a quienes confiar nuestros cachorros, asegurándonos de que cada uno llegue al hogar que realmente merece.

Cría responsable, sin concesiones

Gracias por considerar unirse a esta forma de criar diferente, donde lo importante no es la cantidad, sino la calidad del vínculo que creamos. En Del Capricho trabajamos con responsabilidad, ética y transparencia porque sabemos que está confiando en nosotros algo más que una mascota: un nuevo miembro de su familia.